La discusión sobre la retención a los pagos digitales tomó gran fuerza en las últimas semanas. El Gobierno había propuesto aplicar una retención del 1,5% a las transacciones realizadas a través de billeteras digitales y plataformas como Bre-B, Nequi, Daviplata o transferencias electrónicas. Sin embargo, tras las fuertes críticas de sectores económicos, expertos y usuarios, el Ministerio de Hacienda decidió no implementar la medida y mantener la retención en 0%.
Aunque parezca un ajuste técnico, esta decisión tiene un impacto enorme en el día a día de las PyMEs, que hoy dependen de los pagos digitales como su principal medio de recaudo. En este artículo te contamos qué pasó, por qué la medida fue retirada y cómo beneficia esto a pequeños negocios y emprendedores.
¿Qué proponía el Gobierno?
A finales del año, el Ministerio de Hacienda presentó un borrador de decreto que establecía una retención del 1,5% para pagos digitales. La justificación era unificar el tratamiento entre tarjetas y nuevas formas de pago, además de evitar posibles evasiones en operaciones electrónicas.
La retención aplicaría cuando la transacción representara un ingreso por venta de bienes o servicios, es decir, cuando fuera un pago comercial. El descuento sería automático cada vez que el dinero ingresara a la cuenta o billetera del negocio.
Sin embargo, la propuesta generó un rechazo inmediato.
¿Por qué la propuesta fue retirada?
Varios factores influyeron para que el Gobierno decidiera reversar la medida:
1. Afectaba directamente a las PyMEs
Las pequeñas empresas tienen márgenes reducidos y un flujo de caja sensible. Una retención del 1,5% en cada pago podía significar una reducción importante en sus ingresos.
Para un negocio pequeño que recibe cientos de pagos pequeños al mes, la reducción se volvía significativa.
2. Desincentivaba el uso de pagos digitales
Colombia ha avanzado aceleradamente en la adopción de billeteras y plataformas electrónicas. Hoy, para miles de emprendedores, recibir pagos por Nequi, Bre-B o transferencias es más práctico, rápido y barato que recibir efectivo.
Aplicar una retención iba en contravía de esa tendencia y podía incentivar nuevamente el uso del efectivo.
3. Podía afectar la inclusión financiera
Los pagos digitales son la puerta de entrada al sistema financiero para muchos pequeños comercios, vendedores independientes y emprendedores.
La retención podía frenar este proceso.
4. Las entidades de control ya pueden rastrear operaciones digitales
Las transacciones digitales quedan registradas y reportadas a entidades como la Superintendencia Financiera. Estas, a su vez, pueden cruzar información con la DIAN sin necesidad de aplicar retenciones adicionales.
Esto hizo innecesaria la medida desde el punto de vista de control tributario.
5. Más de 170 observaciones al proyecto
Gremios, bancos, comercios electrónicos, expertos tributarios y ciudadanos presentaron comentarios señalando los riesgos de implementar esta retención.
La presión llevó al Gobierno a dar marcha atrás.
Finalmente, se confirmó que no habrá retención en pagos digitales y que incluso se eliminará la retención para pagos con tarjeta.
¿Qué significa esta decisión para las PyMEs?
La decisión tiene efectos muy positivos para los pequeños negocios. Aquí los más importantes:
1. No habrá descuentos en los ingresos
Los emprendedores recibirán el valor completo de cada venta sin retenciones inmediatas. Esto mejora:
- margen de ganancia
- liquidez
- flujo de caja
- estabilidad financiera
2. Se mantiene la facilidad de recaudo digital
Las PyMEs pueden seguir usando:
- Nequi
- Daviplata
- Bre-B
- Transferencias bancarias
- Pasarelas de pago
- Datafonos virtuales
sin temer que cada venta tenga un descuento automático.
3. Impulso al comercio electrónico
Muchos emprendimientos venden por redes sociales o marketplaces y reciben pagos digitales como único método.
Mantener la retención en 0% fortalece:
- ventas online
- pago contra entrega digital
- ventas por WhatsApp
- facturación electrónica integrada
- ventas por catálogo en redes
4. Ayuda a la formalización y trazabilidad
Las billeteras y plataformas dejan registro de cada movimiento. Esto ayuda a los negocios a:
- controlar sus ingresos
- organizar su contabilidad
- soportar información ante la DIAN
- emitir facturas o documentos soporte correctamente
5. Mayor confianza para seguir digitalizándose
Muchas PyMEs estaban migrando a procesos digitales de:
- recaudo
- facturación
- inventario
- pagos a proveedores
- conciliaciones bancarias
La eliminación de la retención es un mensaje de estabilidad regulatoria para continuar ese camino.
¿Qué deben tener en cuenta las PyMEs a partir de ahora?
Aunque la retención no se aplicará, los negocios sí deben fortalecer su control contable. Aquí algunas recomendaciones:
1. Registrar todos los ingresos
Cada pago digital debe quedar registrado correctamente en el sistema contable o en la plataforma de facturación que usas.
2. Emitir factura electrónica cuando corresponda
La DIAN exige factura para:
- ventas de bienes
- prestación de servicios
- ingresos gravados
Recibir el pago por una billetera NO reemplaza la obligación de facturar.
3. Mantener conciliaciones claras
Al tener varios medios de pago, es clave conciliar:
- ventas
- facturas
- transacciones digitales
- ingresos bancarios
Esto evita diferencias para fines tributarios.
4. Usar herramientas digitales
Plataformas como Facturo permiten:
- emitir factura electrónica sin complicaciones
- hacer seguimiento de pagos
- generar documentos soporte
- descargar reportes contables
- mantener todo en orden ante la DIAN
La digitalización sigue siendo la mejor defensa ante cualquier cambio normativo.
Conclusión: una buena noticia para las PyMEs
La decisión del Gobierno de descartar la retención a pagos digitales es un alivio para la gran mayoría de emprendedores, comerciantes y PyMEs del país. Mantener la retención en 0% protege sus ingresos, promueve la adopción de pagos digitales y fortalece la formalización.
Además, reafirma que la economía digital juega un papel clave en la inclusión financiera y en el crecimiento de los negocios pequeños.
Para las PyMEs que trabajan con ventas digitales y necesitan procesos ordenados, esta es una oportunidad para seguir fortaleciendo su gestión financiera y tributaria con herramientas modernas, seguras y fáciles de usar.





